En una fuente o cacerola resistente al horno
se van colocando capas de cebolla cortadas en rodajas finas, patatas y tomate hasta
llenarla.
Entre capa y capa se echa un poquito de aceite y sal, y al final de
todas las capas perejil muy picadito y un vaso de caldo.
Se mete en el horno y
se deja cocer una hora. Y ya está.
Cuando no hay pan rallado:
Si no tienes pan rallado para envolver tus
fritos, usa sémola gruesa y verás que buen resultado. Cuando no tengas
mantequilla para la bechamel, emplea aceite en la misma proporción.
foto encontrada en internet |
No hay comentarios:
Publicar un comentario